domingo, 1 de marzo de 2009

17 HIPPIES




Este lunes llegue de clase de alemán bastante hecho polvo, la verdad. Fue un día duro en el curro, y después de 8 horas aguantando marea y otras dos de gramática alemana uno no esta para muchos lujos. Dejé mi bici en el jardín y entre a la cocina, donde se encontraba mi compañero de piso Philippe con la nariz colorada como un pimiento; había agarrado gripe de caballo. Me lanzó una mirada incrédula:
-“Qué haces aquí!? En 20 minutos empieza el concierto de los 17 hippies!! ”
Hostias!!!, que memoria… y tenia la entrada comprada desde hace dos semanas! Se me había pasado por completo. Fue el mismo Philippe el que me convenció para acompañarle. Al estar enfermo le dio la entrada a mi otra compañera Milena. Sin pensármelo dos veces, me hice un mini bocata (no había probado bocado desde las 12!), recogí a Milena y pusimos rumbo al evento. Gracias a dios pasaba por delante de casa el autobus 26 en ese preciso momento. Nos delante de la puerta de la "Schlachthof", sala donde tenía lugar el concierto. Dejamos los abrigos en un guardarropa a toda pastilla. Solo llevaban media canción…. Misión cumplida!



Para mi sorpresa me encontré con un público de lo mas variopinto: ancianos, parejas con niños, estudiantes… todos elloshipnotizados bajo las brutal presencia escénica de los 17 Hippies (que ni son hippies ni tampoco son 17... pero casi!). La formación, de origen alemán, fue concebida para poder tocar en cualquier lugar sin amplificación: cuentan con dos acordeones, una potente sección de viento, dos violines, cello, contrabajo, banjo, guitarra acústica, ukelele... Entre sus influencias se dejan oír desde la música balcánica (tipo Goran Bregovich), hasta la chançon francesa, previo paso por el country de Louisiana o el blues del delta. Durante casi dos horas inundaron la sala con su música multirracial y mestiza, que a ratos invitaba a bailar y a hacer el calamar, y a ratos te ponía la carne de gallina.
Marchamos de allí con un sabor de boca estupendo. Este sí que es modo de empezar bien la semana! Os pego un video que os dará una idea de lo que allí se vivió. El tema se llama “Jovano Jovanke”, y si la Wikipedia no miente, es un tema tradicional Macedonio, mira tú por donde… Verlo en directo es algo muy especial.

Saludete!!

lunes, 21 de julio de 2008

EMILIO BOTIN

Ya sé que me estoy currando muy poco las entradas esta semana, pero os prometo que en cuanto pase la debacle de la mudanza me pongo en serio a escribir. Entre tanto os pego un video de Emilio Botín hablando inglés. Como los mismísimos ángeles habla el tío... enhorabuena Emilio, lo estás bordando, "my son"!

Con todos uds., Emilio Botín.

domingo, 20 de julio de 2008

La historia de las cosas

Aquí os pego un video muy bueno. Muy bien explicado, realista y sin dramatismos. La pura realidad.Espero vuestras opiniones.

Story of stuff.

Una canción

Estos dias estoy enganchado a varias canciones. Tengo el soniquete en la cabeza y no soy capaz de quitármelo (lo que aquí llaman "Ohrwurm", que traducido literalmente es "gusano de oreja"... curioso verdad?). He decidido compartir una de ellas con vosotros, y así de paso os la pego!! jaja!! El video es un poco paranoia, pero en conjunto con la letra de la canción, tiene su miguilla.

"Please forgive me" de David Gray. Espero que os guste.


jueves, 17 de julio de 2008

LA PARTE POSITIVA DE LAS COSAS



Uno a veces no entiende el cómo o el porqué de las cosas. Quién soy? Cómo he llegado hasta aquí? Porqué hice esto y no aquello? Comportamientos y decisiones que en ciertos momentos nos parecen lógicos, se tornan inadmisibles al mirarlos friamente un tiempo despues. Nuestras elecciones condicionan nuestro porvenir. Algunas las hacemos casi a ciegas; otras las tomamos sin saberlo. Es lo que hay.

Tranquiliza pensar el hecho de que es bueno cometer errores (El que no se consuela es por que no quiere…). Para empezar porque si no la vida sería un verdadero coñazo. También, porque en cierto modo somos nuestros errores, aunque aceptar los propios no sea plato de buen gusto para nadie. Errar es el modo que tenemos de mejorar.

Soy de la opinión de que el esfuerzo diario es el que crea caminos, pero también los errores y la suerte juegan un papel fundamental. Aceptarlo forma parte del juego.

Creo que el secreto está en mirar el lado bueno de las cosas, darse cuenta de que no todo es tan malo como parece, porque no suele serlo. A menudo las cosas no salen como pensamos… Por no decir nunca! Pero como dice la canción, no siempre puedes conseguir lo que quieres, pero si lo intentas, puede que encuentres lo que necesitas.






La muerte por crucifixión no está tan mal… Al menos es al aire libre!” Monty Pithon.

lunes, 14 de julio de 2008

Flohmarkt


Un domingo más en esta ciudad… Ya hasta me parece normal despertarme aquí! La verdad es que me sorprende esta ciudad, hay más fiesta de lo que parece. Y si no la hay, se arma! en realidad la fiesta va por dentro jeje!!



Prontito de mañana me fui al Flohmarkt bremense, que viene a ser el equivalente alemán a nuestro querido rastro. No es tan multicolor como pueda ser el de Madrid, o como el de mi querido León, pero tiene su punto. Una tienda de discos especializada en rarezas de los 60, o de libros usados (y cuidadosamente conservados en bolsitas de plástico), o vendedores de bicicletas probablemente robadas, son sólo unas de las pocas posibilidades que ofrece este curioso lugar. Un turco muy simpático vendía, entre otras cosas, tarjetas de memoria RAM, que exhibía orgulloso en su diminuto puesto, castigado sin piedad por el sol bremense. Por supuesto, no tenían ni caja ni nada. En fin…

Había un puesto de verduras, legumbres y alguna cosilla más. Pensé en comprarme un kilo de sal para echárselo a mis compis de curro, que son unos sosos! jaja, En el fondo no son malas personas. Y si lo piensas, tampoco todo lo soso es malo! lease la morcilla leonesa, que debe ser sosa y picante. Vaya por Diós, será casualidad el acordarme de tal manjar?...

No, en absoluto.

Este sábado cumplí 4 meses en Alemania. A priori puede no parecer mucho, Sin embargo, se me han hecho largos y densos, cargados de vivencias, experiencias buenas y malas. Ha sido como todo un año en León. Las primeras clases de alemán, primeras ensayos de entrevista con mi colega Edu (realmente una gran ayuda), las entrevistas de trabajo de verdad (telita!!) las ofertas de empleo donde san Pancracio perdió el mechero… Ha sido duro pero el balance es muy positivo. He aprendido muchas cosas, de mi mismo y del mundo en general. El idioma va mejor, la verdad, pero aun queda. No obstante, me voy soltando, y queda tiempo…

Estoy buscando días para volverme, pero no me está resultando fácil. Tengo ganas de volver a casa. Os echo de menos.


Un fuerte abrazo a todos.

Pd- A los que organizais la SU de León este año, muchos ánimos!! Va a salir genial, seguro…

lunes, 30 de junio de 2008

GRACIAS



Lunes, demasiado temprano.




Pelo mojado, barba de un día. Los rayos de sol, arrogantes, me ciegan a traición; Yo les respondo arrugando la nariz. Monto en el tranvía, el cruasán del desayuno aún atravesado en la garganta. Consigue, no obstante, seguir su camino, ayudado por un minibrick de zumo de naranja. Dispongo de una superficie del tamaño de una baldosa para colocar mis casi dos metros de humanidad. Dos paradas más tarde, un gordo sudoroso con una gorra de Alemania se levanta, dejando tras de sí un asiento libre y un olfativo recuerdo de su presencia. Soy más vago que escrupuloso, así que con la velocidad del rayo me acomodo en el nuevo espacio, mientras intento resignarme a la idea de tener que hablar alemán (o de intentarlo) durante el día. A mi alrededor no veo más que caras largas, y alguna banderita por el suelo. La gente susurra, y se miran unos a otros con ojos azules ribeteados de ojeras moradas. Hemos perdido, piensan.

Llego a la oficina, y saludo a mis compañeros. Les tengo preparada un pequeño detalle de reconciliación (las penas con bombones son menos). Hoy soy yo el que está alegre, y aunque no pueda celebrarlo como deseo, con la gente que quiero, me siento orgulloso, qué coño, de venir de donde vengo. De que mi selección haya ganado la Eurocopa, como hay que ganar, pasando por encima de los mejores. La victoria merecida es mil veces más dulce. Esa es la prueba de que el destino no es la meta, el camino es lo que nos hace mejores. Intento apuntarme esa lección y grabarla a fuego en mi interior; ojala la interiorice algún día. Mientras, sigo esperando…




Gracias.